
Tras las palabras de bienvenida que dirigió a los asistentes el P. Agustín Borrell, ocd, en representación de todos los Órdenes e Institutos religiosos congregados, en su homilía el Sr. Arzobispo remarcó el significado que hoy tiene la figura de Santa Teresa de Jesús. Mons. Pujol recordó como el principal punto de la experiencia mística es la oración en bien de los demás e hizo mención de cómo este quinto Centenario del nacimiento de Teresa de Jesús encaja perfectamente en el Año de la Vida Consagrada que Francisco decidió convocar y que estamos celebrando.
Al terminar la celebración eucarística hubo una ofrenda floral a la imagen de Santa Teresa ante la basílica de Montserrat, una de las primeras estatuas que se colocó en 1949. Varias instituciones teresianas vinculadas a Santa Teresa van ir componiendo un mosaico con el nombre de la santa, y se cantaron cantos adecuados inspirados en la obra poética y mística teresiana.